Soy Mari Lozano, una apasionada fotógrafa de emociones y orgullosa mamá de dos adolescentes. Con más de dos décadas viviendo en Barcelona, mi viaje desde los primeros días en un barrio obrero de Sevilla hasta mi estudio en Llinars del Vallés ha sido un constante descubrimiento. Inicialmente formada en informática de empresa, mi corazón se inclinó hacia la creatividad, y tras recibir mi primera cámara réflex, supe que mi destino estaba en la fotografía. Cada sesión es un viaje a la fotografía infantil, fusionando mi amor por la decoración bohemia y la captura de momentos familiares. Mi estudio, Mari Lozano photography, no es solo un espacio de trabajo, es vuestro hogar, diseñado con cariño para que os sintáis cómodos y especiales. ¡Os espero con entusiasmo para compartir juntos la magia de capturar emociones y recuerdos únicos!